miércoles, 28 de noviembre de 2007

Educar

¿En qué consiste educar?

Como padre, muchas veces me he hecho esa pregunta. No es fácil, porque no hay un manual de instrucciones "cómo educar a sus hijos"... al menos, ninguno digno de verdadera confianza. Opiniones hay mil, soluciones y trucos hay millones. Y sigue habiendo padres preocupados, ansiosos, tensos, decepcionados, temerosos, incluso desapegados de la educación de sus hijos.

Algunos consideran que lo importante de la educación es dotar al niño de títulos. La educación se reduce a simple progreso escolar, cuantificable, mensurable en términos de éxito o fracaso. De paso, los padres disponen así de una herramienta cómoda y simple para medir su propio éxito como padres... y si las cosas van mal, acuden al psicólogo -para que trate al niño. Entre tanto, es probable que el niño acabe siendo un empollón (caso de tener éxito en la tarea), o un fracasado (caso de no tenerlo); probablemente, en cualquier caso, socialmente inadaptado.

Los abogados del entorno tratan de evitar al niño las "malas influencias". Procuran ocultarle la cara sórdida del mundo, para que crezca en un entorno saludable y enriquecedor. Desgraciadamente, con ello el niño se forma una imagen incorrecta del mundo... algo que le planteará serios problemas cuando, finalmente, se vea envuelto activamente en ese mismo mundo. Pero tarde o temprano el niño descubrirá el engaño (pues es así como lo vivirá), y probablemente adquiera una desconfianza crónica hacia los mayores, un punto de vista cínico sobre el mundo o, tal vez, incluso una fuga de esa obstinada, dolorosa y "equivocada" realidad.

Para algunos, lo importante es la disciplina y el orden. Se da por supuesto que sin un orden y una disciplina no hay progreso posible, y así se somete al niño a una disciplina de horarios, de actividades, de sueño, de amigos, de prácticas saludables. Se espera que el niño adquiera de este modo "hábitos correctos" y acabe haciendo propia esa disciplina para ser, en suma, disciplinado. Lo que adquiere, en cambio, es el hábito de regirse por disciplinas impuestas, cierta rigidez de pensamiento y la tendencia a acatar las normas sin cuestionarlas, siempre sometido a la voluntad de otros; o por el contrario (por efecto péndulo) a renegar de cualquier tipo de orden y control sobre la propia vida, en una espiral de negación sin sentido que suele conducir a la marginación, la exclusión y la autodestrucción.

Hay muchos otros modelos además de estos, en los que es fácil encontrar problemas similares a los descritos.

¿Qué hacer, entonces? ¿Cómo educar?

Un punto crucial, y que frecuentemente se pasa por alto, es el papel de absoluto protagonista que el niño desempeña en su educación. El proceso de aprendizaje es una tarea dirigida y controlada por quien está aprendiendo, no por quien pretende educar. No es el padre, o el profesor, quien educa al niño, sino el niño quien aprende de ellos. Aprender es una capacidad intrínseca del ser humano; educar, entonces, tendrá que ser básicamente orientar al niño para que desarrolle al máximo, desde dentro, su capacidad de aprender.

Así, en lugar de conseguir títulos, importa que el niño adquiera conocimientos sobre el mundo que le rodea y que aprenda a manejarlos; que aprenda a obtenerlos, a relacionarlos, a extraer conclusiones, a extrapolarlos. Importa que el niño aprenda a pensar.

En lugar de aislarle en un entorno confortable, importa que el niño se abra al mundo, lo conozca, lo integre, aprenda de las cosas que se han probado ya y del resultado que producen. Importa que el niño aprenda qué cosas necesitan ser cambiadas en el mundo en que vive, para así estar dispuesto a cambiarlas cuando llegue su momento.

En lugar de someter al niño a un esquema externo, diseñado por otros, importa que el niño aprenda a diseñar su propio esquema, aprenda a establecer sus propias normas, a desarrollar su propio criterio.

Educar consiste, en definitiva, en guiar el proceso que convierte a un bebé recién nacido absolutamente dependiente de sus padres, en un ser humano adulto, independiente y capacitado para transformar el mundo en el que vive.

8 comentarios:

  1. Y cómo se consigue eso?

    Con el amor, cariño, comprensión y apoyo incondicional de sus padres.

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  2. lo realmente importante es conseguir que tus hijos se realicen. Mas creatividad y menos economia

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  3. Tiempo, mucho tiempo... los hijos y las hijas solo nos piden tiempo...
    Enhorabuena por el blog

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  4. Pues la gran pregunta es: ¿y cómo puñetas hago eso? Como alguien comenta más arriba, el tiempo es fundamental, pero también lo son la paciencia y las ganas... y bueno, seguro que nuestros hijos nunca serán lo que esperábamos de ellos, pero ¿es que acaso somo nosotros lo que nuestros padres esperaban? hayyy, quién tuviera tiempo para educar a los hijos y para otras muchas cosas!

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  5. Gracias a todos por los comentarios.
    Respecto del "cómo hacer eso", no creo que se trate realmente de una cuestión de tiempo. Antes bien, me da la impresión de que a los hijos les dedicamos DEMASIADO tiempo, estando demasiado pendientes de ellos. Creo que la idea es ayudarles cuando ELLOS lo necesitan, no cuando NOSOTROS necesitamos sentirnos padres.

    Me parece que se trata más de actitud que de tiempo. Por ejemplo, creo que es preciso dejar que los niños cometan errores y puedan aprender de ellos. No se arregla nada si siempre les "salvamos" de la catástrofe. A fin de cuentas, ¿no fue así como aprendimos nosotros?

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  6. Sigo sin ver reflejado el amor en ninguno de los comentarios. Supongo q es porque se da por supuesto?

    Si es así, craso error.

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  7. Yo creo k cada uno " educamos" a nuestros hijos de la manera k pensamos k es la correcta, supongo k para unos la forma correcta es intentando abrigarles del frio k existe en la sociedad y de otros dejando k cojan frio para k ellos mismo busque abrigo,.. para gustos hay colores, .. alguien dijo eso no??
    Creo k como siempre los extremos y los radicalismos son exagerados, se puede dejar una cierta libertad de descubrimiento al niño, pero tampoco es malo protegerles. En mi caso kiza soy demasiado protectora, pero actuo según lo k creo acertado de la educación k recibi de mis padres, y cambiando lo k creo k esta incorrecto, ( ojo digo lo k creo, pq kiza yo este equivocada , pero es una condicion humana, cometer errores ..)
    Pienso k NO hay UNA forma correcta de educar, si existiera y fuera tan facil no habria tantas dudas ....
    Un besote `papi :D

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