jueves, 13 de diciembre de 2018

¿Te sientes triste?

Cuando uno hace revisiones de su propia vida, no suele ser buena política hacerlas desde un estado de ánimo "intenso", como un exceso de optimismo o pesimismo, porque las cosas acaban saliendo sesgadas y se queda uno atorado en imposibles. El problema en ambos casos es que uno dedica demasiada atención a lo que pasa por su cabeza y demasiado poca al mundo.

Echando un vistazo al mundo, tal vez puedas ver algunos puntos importantes. El primero, que el mundo cambia. Lo que hace unos años era un país en crecimiento y gente relativamente satisfecha, hoy es un país dominado y exprimido, lleno de descontento y con una brecha social que amenaza convertirse en abismo.

Lo que quiero decir es que las condiciones cambiaron y que eso no es un defecto tuyo. Ahora bien, si el entorno cambia, uno tiene que cambiar también. No tiene sentido lamentarse de lo mal que va todo y lo bien que se estaba antes, a menos que esa reflexión sirva para el futuro. Porque tan solo se puede operar en el futuro: el pasado no se puede cambiar y el presente ¡puf! ya ha pasado.


Si te sientes triste, tal vez sea porque te ocupas tanto pensando en el pasado que no te quedan ánimos para encarar el futuro.

En cada momento, la pregunta más importante será si uno quiere vivir, y en qué condiciones quiere hacerlo.

Si la vida de supervivencia no te satisface, ¿qué vida quieres tener? ¿Cómo puedes dirigirte hacia ella? ¿Con qué cuentas para conseguirlo? ¿Qué dificultades te puedes encontrar? ¿Quién puede ayudarte?

Muchas veces, cuando uno está triston, climático, autocompasivo, estas preguntas parecen extrañas, casi ofensivas, porque "sacan" del tema en que uno está. Es como si hablaran en chino. Como si de algún modo el otro no estuviera valorando o reconociendo lo mal que está uno, lo mucho que sufre, lo difícil de la situación personal. Entonces uno podría preguntarse: ¿por qué mierda es tan importante que otros me reconozcan? ¿es que acaso no lo paso suficientemente mal sufriendo todo esto, que además quiero que me lo recuerden continuamente y me compadezcan?

¿Qué posibilidades tengo de recibir ayuda para avanzar si me muevo dando vueltas siempre en torno a lo mismo, sin avanzar hacia ninguna parte?

viernes, 14 de septiembre de 2018

Evolución virtual


Llevo mucho tiempo reflexionando sobre lo virtual.

Lo virtual es el territorio en el que lo imaginado se vuelve tangible, y la experiencia se configura a partir de una realidad sintética. Llevado al extremo, lo virtual puede reemplazar a lo real, como en la película Matrix. La inmersión en lo virtual es mayor cuanto mayor sea el número de canales de entrada sintéticos.

La plasticidad de lo virtual permite hacer ensayos de realidad. Una especie de qué pasaría si. Los simuladores y los juegos inmersivos permiten experimentar sin correr riesgos.

Uniendo lo virtual y las comunicaciones se da lugar a la presencia virtual. La técnica se va refinando: teléfono, Skype, Google VR. Abarcando cada vez más canales de entrada.

Uniendo las comunicaciones y lo social se da lugar a las redes sociales. Espacios virtuales de intercambio, remedos de foros, ágoras, y patios de colegio. De los blogs a los vlogs, de los 140 caracteres a los videos y snapchats, de nuevo se abarcan cada vez más canales de entrada.

La técnica se desarrolla creando nuevas vías para sintetizar realidad, ampliando los canales de entrada. Muy avanzado el canal táctil y la visión tridimensional, el kinestésico (posición corporal) y el registro de la cenestesia (estado del propio cuerpo). Se experimenta con realidad aumentada.

Cada vez más información por más canales.

La sobreabundancia de información y su inmediatez (el sobreestímulo constante) dificultan la reflexión. No hay tiempo para pensar, y la información relevante queda sepultada en una montaña de ruido. Contra lo esperado, la consecuencia de este proceso es que estamos ampliando nuestra capacidad para procesar información. Pensamos más cosas en menos tiempo.

Uniendo lo virtual, las comunicaciones y lo social se da lugar a la aldea global. Virtual.

Las fake news son otro intento de intoxicación de canal. Ruido con aspecto de señal buscando el descrédito de lo virtual. La respuesta fue rápida y sistémica: se identificó el ruido dándole un nombre y se incorporó el concepto de credibilidad consensuada de la información otorgándosela a unas fuentes y no a otras (Maldito Bulo).

Lo virtual permite imaginar otras realidades y experimentarlas, ampliando nuestras posibilidades y nuestras capacidades.

Y sin embargo ... seguimos necesitando el contacto para encontrarnos en el otro.

De momento.

miércoles, 4 de julio de 2018

Lo normal

"Lo normal" es subjetivo. Cada persona tiene su propio concepto de lo que es normal y lo que es extraño, aberrante o irrelevante.

La mayor parte de lo que uno considera como normal, tiene que ver con los objetos y los valores del momento en que vivió su niñez y adolescencia, centralmente el período entre los 5 y los 15 años. Por ello suele haber un buen nivel de acuerdo dentro de cada generación sobre lo que se considera "normal".

A medida que el mundo cambia, uno va contrastando lo nuevo que llega con aquello que se considera "normal". A veces los cambios son bienvenidos e incluso deseados; otras veces son considerados perjudiciales y, las más de las veces, irrelevantes. Una constante es que todo cambio se vive como novedad y por tanto, distinto a "lo que había", que de algún modo se sigue viviendo como más verdadero que lo nuevo.

Así pues, hay una tendencia a darle más valor de realidad al mundo que uno vivió en su etapa de formación que al mundo en el que vive actualmente.

Sirva como ejemplo la distinta concepción que se tiene del mapamundi según la edad. Para los mayores de 50, Eslovenia, Croacia y Serbia son "países de la antigua Yugoslavia", donde "Yugoslavia" es el concepto de referencia que sirve para situar a los nuevos países balcánicos. Para los menores de 30, en cambio, Yugoslavia fue un país formado por Eslovenia, Croacia y Serbia entre otros, y aquí son estos países los que sirven de referencia para situar el antiguo país balcánico.

El efecto es mucho más acusado con la tecnología. En función de la edad se otorga más crédito a la radio, a la televisión o a las redes sociales. En función de la edad se demonizan los cómics, la televisión o los videojuegos. En función de la edad los electrodomésticos, la calculadora o la compra on-line son comodidades excesivas que nos harán más vagos y más tontos.


Es conveniente tener esto en cuenta cuando se valoran las opiniones de otros. El paisaje de formación de cada uno es importante para entender desde dónde se considera algo irrelevante, ofensivo o peligroso.